Mostrando entradas con la etiqueta diego de la vega. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta diego de la vega. Mostrar todas las entradas

viernes, 28 de noviembre de 2008

Personajes que me encantan (2)

Hablar de Diego de la Vega es hablar de una persona mezquina, cruel y ambiciosa.

Normalmente, en dos años que lleva "la Bea" en antena, no me ha enganchado... algunas veces la veía, típico que no tienes nada que hacer por la tarde (no tenías clase o simplemente, no había ganas de ir) y la veía... o por internet, seguía los avances para no perderme mucho, pero normalmente viendo a otros personajes que a la insoportable de la fea y el Alvarito que eran super pesaos... me gustaba más el rizos del Gonzalo o la Sandra de la Vega y su alterego Sonsoles, que eran unos personajes bastante más simpáticos.

Al fin, las dos tórtolas se casaron (menos mal) y dejaron la serie. Los de telecinco, la continuaron y le han dado mayor protagonismo al malo malísimo (Miguel Hermoso como Diego de la Vega) haciendo que se enamore de una "vulgar" mensajera. Tal ha sido el éxito y el protagonismo alcanzado por su personaje que deberían cambiar la serie y llamarla "Yo soy Diego de la Vega", porque la verdad, a la nueva Bea que han puesto ("Be" para los amigos) es lo más soso que ha parío madre, y ni hablar ya del enamorao de ésta. Si antes Ruth Núñez tenía una voz insoportable, una vestimenta que dolía a los ojos y unas paranoias en la cabeza que era para chocarla contra la pared, la nueva es pija, tonta, sosa, y con la sangre de horchata, pero al menos la voz se la puede escuchar (menos mal). El enamorao es wapo, pero pfff, también vendrá de Valencia (por la sangre de horchata, eh, no os vayáis a enfadar los valencianos), el pobre...

Pero ahí está nuestro Dieguito, que se nos ha enamorao y hace cosas de niño bueno. Lo más increíble es que al actor le entró una úlcera de estómago y ha adelgazado una jartá, tanto que parece que está chupao o chutao. Al principio le seguían poniendo los mismos trajes negros y grandes que cuando estaba entrao en carnes... pero ahora que ya ha adelgazado y su personaje ha tomado un protagonismo que casi nadie esperábamos (o si, porque en los títulos de cabecera aparece el segundo), lo han puesto más mono, lo visten con trajes preciosos, entallados y con corbatas alegres.

Y lo mejor ha sido ese cambio, las sonrisas que saca, y las frases que sigue teniendo como dándoselas de inquebrantable, pero que ya todo el mundo sabe que tiene un punto débil. Me ha gustado la transformación. La serie es mala, de cojones, y los lionistas más aún. Pero bueno, se apoya que tiene algunos actores muy buenos y lo que fallan son los medios... aunque si antes con la insorportable de la Núñez ya tenía un montón de seguidores, ahora que, en mi opinión, la serie está mejor... deberían seguirla más... Aunque claro, los catetillos que la seguían por la parejita estrella, hay muchos y casi todos están super cabreados con la nueva etapa por haber terminado la anterior tan repentinamente...

Que sea lo que la audiencia quiera... al fin y al cabo es la que manda.

jueves, 20 de noviembre de 2008

Todas tenemos una debilidad

Sí, lo confieso, últimamente estoy viendo más de la cuenta la "Yo soy Bea" de los cuyons... mu fuerte. Pero bueno, entre eso y que estoy de aquí pa'allá, el curso que se pone apretadito y tal, comenzamos con las largas temporadas sin actualizar. Espero volver a coger la rutina.

Entre "la Bea" (que más que la Bea me tiene enganchada don Miguel "malísisisimo" y Hermoso, que hace de Diego de la Vega, que se nus ha enamorao!), las pocas ganas de hacer nada, el pro (sí, he vuelto señores, y me he comprado un mandooo), los viajecitos (Graná y Madrid) pero sobre todo, las pocas ganas de pensar... De eso precisamente me dí cuenta el otro día... (los viajes en bus de 6 horas dan mucho que pensar), que hacía tiempo que no me leo un buen libro o veo una buena película... y luego se lo comenté a mi excompi de piso y amiga, Mercedes:

"Cuando tenemos un poco de tiempo libre, sobre todo cuando el tiempo que no es el libre requiere un gran esfuerzo intelectual, tendemos a aprovecharlo con cosas no muy complicadas, que simplemente nos haga pasar el rato".

Y es verdá; el otro día fui a comprarme un libro para el bus, y cual fue mi sorpresa que antes que escoger el "París era una fiesta" que llevo una jartá de tiempo detrás de él para leermelo, va y me compro el best seller "Sushi para principiantes" de Marian Keyes... que ya os comentaré conforme lo vaya leyendo.

Volveré... pronto